- Harina de arroz 100 % natural.
- Rica en vitaminas, minerales, fibra y proteínas.
- Ideal para personas sensibles al gluten.
- Usos: repostería y elaboración de panes, pastas, tempuras y rebozados saludables.
- Apta para dietas veganas.
Utilizado en la preparación de infinidad de platos saludables, la versatilidad de la harina de arroz la convierte en uno de los ingredientes más comunes de nuestros días, principalmente en la repostería y la elaboración de panes, pastas, tempuras y rebozados saludables.
Además, su contenido 100 % natural, que mantiene intactas las características nutricionales del cereal que le da origen, lo convierten en el complemento ideal de las personas sensibles al gluten. Por si fuera poco, diversos estudios destacan el valor nutricional del arroz. Además de vitaminas, minerales y fibra, este grano aporta hasta el 60 % de la proteína total de la dieta en los países que lo consumen1.
Bibliografía:
1“Proteínas de arroz. Propiedades estructurales y funcionales”. 2010. Pinciroli, M. Magister en Tecnología e Higiene de los Alimentos. Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales. Universidad Nacional de La Plata. Argentina. Disponible en: http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/1828/Documento_completo__.pdf?sequence=3&isAllowed=y
Mezclar la cantidad deseada de avena con agua, leche o yogurt y consumir directamente.
También es muy recomendable tomarla junto con un batido de proteína en el desayuno o mezclarla con clara de huevo para cocinar unas deliciosas tortitas.
Ideal para desayunar y/o tomar entre horas.
ADVERTENCIA: Los productos aquí mostrados son suplementos nutricionales según lo establece la Directiva Europea 2002/46/CE sobre complementos alimenticios. Los suplementos alimenticios no tratan de sustituir una dieta equilibrada y variada, únicamente se presentan con el fin de complementar la ingesta de nutrientes de una dieta normal. La información descrita sobre los ingredientes puede no estar relacionada con el efecto final o los beneficios que este pueda realizar. Tampoco tratan, previenen, diagnostican o curan ninguna enfermedad, hechos atribuibles a los medicamentos, según define la Directiva Europea 2004/27/CE, de 31 de marzo, del Consejo y del Parlamento Europeo sobre medicamentos. Los productos no deben utilizarse como sustituto de una dieta o medicación y deben estar fuera del alcance de los niños. El consumo de los productos debe ser controlado por un profesional, ante cualquier duda, siempre consulte a su médico.